La Organización Mundial de la Salud (OMS) entiende la cibersalud como el uso de las tecnologías de información y comunicación para fomentar la salud, ya sea in situ o a distancia) brinda hoy una oportunidad única para el progreso de la salud pública. El fortalecimiento de los sistemas sanitarios mediante la cibersalud puede contribuir al disfrute de los derechos humanos fundamentales porque mejora los niveles de equidad y solidaridad, así como la calidad de vida y de la atención sanitaria.
Desde la 58ª Asamblea Mundial de la Salud A58/21, Punto 13.17 del orden del día provisional 7 de abril de 2005, se puso de manifiesto la importancia del uso de las tecnologías de la información y comunicación para favorecer el acceso a sanidad. Para ello, se elaboraron las bases de una estrategia de cibersalud que permitiera coordinar tanto las políticas públicas; siendo un punto al que se dedica Cibersalud el ciberaprendizaje al servicio del público, entendiendo por ello, en este contexto, el uso de cualquier tecnología o medio de comunicación electrónicos con fines de aprendizaje.
El 2011 la Organización Panamericana de la Salud aprobó la Estrategia y Plan de Acción sobre eSalud cuyo desarrollo e informe final del 2018 puede revisarse en su web, mostrando avances e importancia de continuar trabajando en alianzas público privadas. A nivel internacional, el Global Observatory for eHealth mediante sus investigaciones y publicaciones aporta una información de interés ante la importancia de trabajar en colaboración, y favorecer el alcance a la sociedad de atención sanitaria a la altura de los desarrollos tecnológicos actuales.